El presidente Mauricio Macri ha declarado que ya habló con Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), para alcanzar un acuerdo que pueda permitir este apoyo financiero.
Macri asegura que su país necesita el dinero para superar un contexto internacional que se vuelve cada vez más complejo y con tasa de interés más alta. Sin embargo, aun no ha dicho cuanto pedirá.
Recientemente el peso argentino se desvalorizó por más del 5 % frente al dólar a lo que Macri declaró que “somos de los países del mundo que más necesitamos del financiamiento internacional producto del enorme gasto que heredamos” fueron sus palabras exactas.
El hecho de pedir ayuda al FMI y tener que recurrir a esas medidas para poder cubrir con las necesidades de los habitantes y seguir con el funcionamiento del país es básicamente visto como un fracaso, además le implica un gran costo político a Macri,
Pero el presidente actual de al republica Argentina no consiguió otra opción y decidió asumir él mismo la responsabilidad del anuncio dando la cara por su territorio y por su pueblo.
En un contexto desfavorable para las monedas de la región, el peso argentino dejó en evidencia su vulnerabilidad La divisa alcanzó los 23.50 pesos en consecuencia de las medidas extraordinarias para evitarlo.
Sumado a esto, durante la última semana el banco central subió a 40% las tasas de interés después de haber estado en un 32,25 %, esto en un intento por desalentar a los inversores que huían indudablemente del peso y se iban de lleno con la moneda norteamericana.
Debido a esta decisión los mercados se han visto más calmados y tranquilos en el momento de hacer sus ventas. La bolsa, sin embargo, presentó una caída del 5% a mitad de la rueda.
Macri describió con mucha claridad el origen de los problemas: implementar una política económica gradualista que resuelva el desastre dejado en las cuentas públicas lo cual depende del financiamiento externo que sin lugar a duda a contado con un contexto favorable los últimos dos años.
Ahora bien, esta situación ha presentado cambios en la actualidad por distintos factores: sube el crudo, suben las tasas de interés, se han devaluado las monedas emergentes, entre otras cosas.
Respuesta del Fondo Monetario Internacional
El fondo cree que el principal problema es el déficit externo y que lo que necesita el país es una devaluación muy fuerte, por lo que le exige a Argentina que libere el dólar y se vaya a más de $30.
Para ello, el FMI le pide que deje de vender reservas para sostener el dólar a $25 pesos argentinos, lo que llevaría a la divisa a una nueva banda que va de $30 a $35 pesos por dólar.
Por la magnitud del déficit externo el Fondo Monetario Internacional no se encuentra dispuesto a financiarlo, por ello pone la condición de acomodar al precio de mercado un tipo de cambio cercano a los $35 para entregarle un posible crédito de hasta 30 millones de dólares.
Así mismo, el FMI le prohíbe al Gobierno argentino seguir vendiendo reservas en defensa del tipo de cambio considerando que el Banco Central llegó a vender hasta 5 mil millones de dólares a $25 pesos en un intento de fijar el precio y evitar que se siga elevando.
El FMI puso el ojo en el déficit externo del país, considerando que en los primeros cuatro meses del año las diferencias entre importaciones y exportaciones llegaron a los 3.420 millones de dólares, 2,6 veces más que el inicio del año pasado. Quedando así que en casi todo 2017 el déficit casi alcanzó los 9 mil millones de dólares.
